Un equipo de investigación formado por expertos en ingeniería genética, nanotecnología e ingeniería eléctrica ha demostrado una tecnología inalámbrica que permite controlar circuitos cerebrales específicos del cerebro de una mosca en menos de un segundo, según un estudio publicado en la revista Nature Materials.
¿Cómo se hizo?
El equipo, dirigido por neuroingenieros de la Universidad de Rice, en Estados Unidos, creó primero moscas modificadas genéticamente para que expresaran un canal iónico específico sensible al calor que, cuando se activaba, hacía que los insectos desplegaran las alas.
La tecnología, que combina ingeniería genética, nanotecnología e ingeniería eléctrica, activa los circuitos neuronales unas 50 veces más rápido que la mejor tecnología demostrada anteriormente para la estimulación magnética de neuronas definidas genéticamente, según los investigadores.
Utilizaron señales magnéticas para activar neuronas: eso les permitió controlar la posición del cuerpo de las moscas de la fruta que se movían libremente por un recinto. Los resultados de este trabajo se publican en la revista Nature Materials.
¿Qué se espera?
Esta capacidad de activar células genéticamente seleccionadas en momentos precisos podría ser una herramienta poderosa para estudiar el cerebro, tratar enfermedades y desarrollar tecnología de comunicación directa entre el cerebro y la máquina, según los investigadores.