Alerta amarilla en Ecuador en torno al volcán Cotopaxi por el aumento de su actividad sísmica y la expulsión de gases, vapor de agua y ceniza en una nube que llegó a más de un kilómetro de altura entre el viernes y el sábado.
Desde el pasado viernes, el volcán volvió a dar señales de actividad con registros de un tremor leve por la emisión de gases, vapor de agua y poca ceniza, que ha hecho recordar su reactivación en 2015 (tras permanecer en calma durante 138 años). En ese entonces, el coloso expulsó grandes bocanadas de gases, vapor de agua y ceniza durante varias semanas, pero luego disminuyó su actividad.
Este volcán es considerado uno de los 15 más peligrosos del mundo. La amenaza radica en el extenso glaciar que lo cubre y que puede derretirse, lo que afectaría a las poblaciones que se asientan cerca del volcán. De acuerdo con el Instituto Geofísico, la frecuencia histórica de las erupciones del volcán, su estilo eruptivo, su relieve, su cobertura glaciar y porque, en caso de una erupción, la afectación sería significativa en la sierra y costa ecuatorianas.
Se evitará el acceso de turistas al lugar, situado en la cordillera de los Andes, a unos 45 kilómetros al sureste de Quito.